¿Cuánto cuesta ser alcalde en Soledad, Malambo o Galapa?
“En los municipios de Galapa y Malambo conquistar la alcaldía puede que tenga un costo que oscila entre los 3 mil y los 5 mil millones de pesos (entre 600 mil y más de un millón de dólares aproximadamente al cambio de $4.500 / dólar). Para alcanzar una curul en el concejo municipal de cualquiera de esos entes territoriales se requieren más de 100 millones (unos 25 mil dólares), siempre y cuando el aspirante tenga un trabajo político que le represente cierta votación en las urnas. Ahora bien, según los entendidos: “en Soledad estaría pasando de los 14 mil millones de pesos (más de 3 millones de dólares) la inversión para ser alcalde”.
Por Guillermo León Pantoja
ntes que se aprobara y se ejerciera en cada municipio de Colombia la escogencia de alcaldes por elección popular, estos eran nombrados por los gobernadores. Las elecciones regionales constituyeron un gran avance en la democracia colombiana y el ejercicio supuso la libre expresión de los colombianos en estos nuevos comicios.
De hecho en Soledad aún son recordados algunos burgomaestres cuyos períodos, más por su carisma que por sus obras, persisten en la memoria de los más veteranos; nombres como el de Camilo Barceló, Jaime Bolívar e incluso el desaparecido periodista Rafael U Lafaurie Rivera, entre otros, ejercieron como alcaldes por designio de los gobernantes departamentales que a su vez respondían a su partido político y por supuesto a su caudillo o jefe regional.
El primer alcalde electo en las urnas por los habitantes de este municipio fue el tristemente inmolado Saúl Sandoval, -cuyo homicidio aún no ha sido resulto- y le han sucedido, hasta la fecha, 11 mandatarios elegidos mediante el sufragio, además del montón de alcaldes encargados, sobretodo en el período 2004-2005, fecha en la cual, por primera vez, se debieron realizar unos comicios extraordinarios al ser destituida Rosa Stella Ibáñez, porque su foto no apareció en el tarjetón electoral. Recordemos que ella decidió postularse recogiendo las banderas de su esposo, José Castillo Bolívar, quien había sido asesinado por paramilitares el 30 de septiembre de 2003 a escasos 30 días de las elecciones. Mucho se dijo que Ibáñez había sido destituida por vínculos con los paramilitares pero -aunque los vínculos existieron ya que no podía ser de otra manera- la verdadera razón jurídica fue el tema de la foto en el tarjetón o lo que es lo mismo, una leguleyada que la sacó del juego; pero esa es otra historia y la idea es hablar hoy de cuánto cuesta ser alcalde. En el caso de Stella Ibáñez el costo fue, además de sangriento, ver luego su vida destruida en lo personal, en lo político, en lo moral y en lo económico.
Lo que dicen los expertos en “finanzas electorales”
Puede que lo siguiente suene a exageración o a mito urbano, pero “si alguien aspira a ser alcalde de Soledad debe contar con al menos 1.500 millones de pesos de arrancada”, de acuerdo a lo señalado por expertos en “finanzas electorales”. A eso se le suman aportantes políticos como senadores y representantes, tampoco faltan los “apostadores al poder” que invierten en las campañas con mayor probabilidad de éxito para luego poder acceder a la jugosa contratación estatal; de allí que no sea extraña la presencia de dineros de dudosa procedencia en estas “apuestas”.
Observemos este dato, en los municipios de Galapa y Malambo -ambos parte del Área Metropolitana de Barranquilla- conquistar la alcaldía puede tener un costo que estaría oscilando entre los 3 mil y los 5 mil millones de pesos (entre 600 mil y más de un millón de dólares aproximadamente al cambio de $4.500/dólar); para alcanzar una curul en el concejo municipal de cualquiera de esos entes territoriales se requieren más de 100 millones de pesos (unos 25 mil dólares), siempre y cuando el aspirante tenga un trabajo político que le represente cierta votación en las urnas. Ahora bien, según los entendidos, en Soledad pasa de los 14 mil millones de pesos (más de 3 millones de dólares) la inversión electoral para ocupar el primer cargo municipal; y si de concejales se trata, para tener posibilidades en la contienda el interesado debe contar con al menos 200 millones de pesos (unos 50 mil dólares) para participar, siempre y cuando tenga votos previamente conquistados.
Aunque estas cifras no son oficiales y jamás lo serán, se trata de sumas en las que existe cierto consenso por parte de expertos en el tema. Y nunca habrá un monto oficial y certificado de estos gastos de campaña sencillamente porque, de ser como señalan los asesores y expertos consultados, estos se encuentran muy por encima de los topes establecidos, aunque tampoco me estoy refiriendo a todo el que ostente o hallaa ocupado el puesto de alcalde municipal, porque debe haber excepciones, supongo.
¿Cuánto gasta un senador estadounidense en su campaña?
Para brindarles una idea de lo astronómicas que pueden ser estas cantidades, en los Estados Unidos un senador no puede gastar más de un millón de dólares (4.500 millones de pesos) en su campaña electoral. Dicho esto, con lo que se gastan en Malambo, Galapa y Soledad en cada campaña a la alcaldía, saldrían cinco senadores estadounidenses, y esto podría multiplicarse por dos si sumamos las campañas perdedoras. Por cierto ¿Cuánto cuesta en Colombia ser Senador de la República?
De manera que no es nada económico entrar en el juego electoral, se trata de verdaderas fortunas si tomamos en cuenta que para acceder a una privilegiada “visa de inversionista” en los Estados Unidos se requieren solo 500 mil dólares. Allí es dónde cualquiera se pregunta ¿Qué hace tan apetecible ser alcalde?
VER Análisis: ¿Porqué la alcaldía de Soledad es tan apetecible
La maleta de Cristina Kirchner no era nada en comparación con los “maletines del poder”
Lo extraordinario es que se habla de estas cifras sin ningún tipo de asombro, como si se tratara de algo enteramente normal. Recordemos el enorme escándalo mundial que significó la captura de una maleta con 790 mil dólares a un empresario venezolano por parte de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) en Argentina, con destino supuestamente a la campaña presidencial de Cristina Fernández de Kirchner en el año 2007. Aquello fue noticia en todos los medios de comunicación del mundo y se trataba únicamente de la tercera parte de lo que aparentemente cuesta ser alcalde en Soledad.
Parece que el hecho de que se gaste esa fortuna en una campaña a la alcaldía de una ciudad -que ni siquiera es capital de departamento- y cuyo presupuesto anual ni siquiera llega al billón de pesos, no fuese noticia.
Está comprobado que los “topes” en el gasto de las campañas, establecidos por la norma electoral, no sirven de nada. Es que nadie repara en una campaña electoral en la cual un solo candidato puede gastarse hasta 3 millones de dólares, sin mencionar que cada 4 años se presentan al menos 2 candidaturas dispuestas a gastar esa fortuna.
¿Cuánto cuesta entonces ser alcalde en las ciudades más importantes de Colombia? ¿Cuánto cuesta una campaña para ser alcalde de Bogotá, de Medellín, de Cali o de Barranquilla?
Las cuentas no cuadran, sencillamente no hay forma de recuperar esa inversión en un periodo de gobierno, eso explica que un alcalde llegue con toda la intención de trabajar por su comunidad y termine sucumbiendo ante las presiones de aquellos a los que le adeuda parte de la credencial. Allí es donde entran en juego los contratos millonarios con gente que muchas veces no es idónea, allí es donde desaparece el dinero púbico en obras mal construidas, en la contratación escandalosa de personal que no es necesario. Allí es donde viene la frustración en lo moral, en lo personal, en lo colectivo.
El poder nubla la razón y termina maniatando a muchos mandatarios empeñados ante los inversionistas que actúan más como pagadiarios que como socios políticos. Mientras esto suceda no hay forma de que el país cambie.
Ahora bien, estamos hablando de gastarse un montón de plata en una campaña electoral, pero ya es hora de analizar en qué se gasta esa fortuna… en la próxima entrega los pormenores de los gastos en una campaña política tanto a la alcaldía como al concejo.